Recuerdo que en aquellos primeros tiempos yo quise irme, te pedía tiempo para poder verte como un amigo y vos, y vos me decías te amo, mientras me hacías el amor. Volví y una y otra vez te ibas con ella.
Recuerdo que te eche de casa en el peor estado en el cual te vi, culpa de ella, obvio; te pedí un remis y te mande a tu casa, casi inconsciente, después de haber leído un msj donde decías que lo único que consiguió fue que me cojas a mi todo el finde; esa noche leí tus mails, la carpeta de Wibi entera...
Volví, el lunes cuando me llamo Héctor, volví. Quería ayudarte, no dejarte solo, como persona como mujer quería ayudar, quería verte bien. Fuimos a la psicóloga, al psiquiatra, compramos medicación, te acompañe.
Recuerdo que llegaba del trabajo, prepara la cena , acostaba a mi hijo y 23 hs de la noche me iba a tu casa; a acompañarte a estar a tu lado y que todo mejore. No pude mas, me dolía el alma y el corazón.
No hice más que irme y la metiste en tu casa, dios, cuánto dolor, cuanta bronca. Sentí que me pisoteaste, me sentí nada, nada de lo que había hecho en esos días supiste valorar. Enojada es poco, estaba furiosa y llena de odio.
Después volví. Me tome una garompa gigante y volví, en ese estado. Nada me importaba más que estar con vos, te extrañaba tanto.
Pase mi semana de vacaciones con vos, mi hijo no estaba, por que así lo había planeado. Para estar con vos. Me fui cuando me contaste que querías ir a pegarle a alguien que andaba con ella. Que decepción tan grande.
Y volví desesperada directo al hospital. Claro, siempre por ella.
Pase los peores días que recuerdo. Tenía el corazón en mil pedazos. Estabas mal, perdido.
Yo estaba ahí a tu lado, asustada y muy muy triste, pero ahí.
Te internaban, esa última noche me hiciste el amor.
Volví, en tu casa me recibía tu papá, no podía creer que no seas vos el que me abría la puerta.
Llore tanto.
Saliste y yo estaba ahí, esperando.
Me hiciste el amor y esa fue la última vez.
Te acompañe, no te deje solo, quería que todo esté bien de una vez, tu trabajo, tu vida, tus días.
Y mentiste, te la cogiste después de tantas cosas, la metiste en tu cama otra vez.
Volví.
Trate de verte diferente, de aprovechar los tiempos juntos. Salimos, miramos pelis...
Pero me insultas, me ninguneas, me refriegas que ya no soy para vos lo que era y sabes que...duele, siempre duele.
Perdedora fue la última palabra que leí y ahora si...ya no vuelvo
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